Una persona, después de un trasplante de riñón exitoso, puede volver a llevar una vida normal como cualquier otra persona. Me gustaría felicitar a su hermano y a su esposa por el nuevo comienzo.
No veo la razón de por qué ella no sería capaz de llevar una vida normal, si el riñón está funcionando bien. Ella estaría en la vida, medicamentos largos, eso es todo.