Créeme, apesta. Cada vez que enseño algo nuevo a los estudiantes, dicen que ya lo han visto en Google. Todo el mundo comete errores, por lo que algunas veces me equivoco al escribir algo o contestar una pregunta diferente, me encuentro parado a mi lado despejando la duda de que la respuesta que les dije es totalmente diferente de lo que vieron en Google.
Hay algunos niños inteligentes que preparan un cuestionario de Google y me hacen preguntas todos los días. Y si, mi mala suerte, no puedo responderles, me hacen una broma pesada.
Hay algunos estudiantes que son perezosos para hacer la tarea por su cuenta. Entonces, cada vez que les doy la tarea de escribir un ensayo, un párrafo o un artículo sobre algo, copian todo el contenido de Google y, debido a esto, finalmente fracasan en el examen, ya que no son capaces de hacer la oración por sí mismos.