Sí pueden. Los gatos también pueden ser diabéticos.
Mi Chihuahua, Apollo, fue diagnosticado con diabetes cuando tenía 9 años. Ahora toma inyecciones dos veces al día de insulina. Muchos perros viven vidas largas y completas, pero hay cosas importantes que deben saberse. Un gran porcentaje de perros diagnosticados con diabetes quedarán ciegos dentro de un año de los diagnósticos. Mi chico tiene Otras enfermedades también pueden ocurrir como enfermedades del corazón. La diabetes también puede hacer que los problemas simples sean mucho más difíciles de superar, como un corte pequeño. Apollo tenía un rasguño en su ojo que se rehusaba a sanar sin importar cómo lo tratamos. El veterinario fue mi guía durante todo el proceso y hasta la fecha, meses después todavía tiene un corte en el ojo y le administro morfina diaria para ayudarlo con el dolor (tiene otros problemas dolorosos que hacen que la morfina sea necesaria).
Si su perro tiene diabetes, es importante asegurarse de que coma correctamente, haga ejercicio y obtenga la cantidad correcta de insulina. Dos factores muy importantes a tener en cuenta que indican que su diabetes no está bajo control es el exceso de alcohol y la micción muy frecuente. Mi niño a menudo hará pis en la casa en su camino hacia la puerta. Él ni siquiera se da cuenta de que ha orinado. Su vejiga está tan llena que ya no puede controlarla. Mi hijo está llegando al final de su vida debido a muchas cosas, la diabetes es solo un problema.
Es un diagnóstico aterrador y costoso, pero muchos perros realmente viven una vida plena y feliz. Si tiene alguna duda de que su perro podría tener diabetes, llévelo a un veterinario. Cuanto antes el diagnóstico, mejor es el pronóstico.