Sí, a veces los cambios en el azúcar en la sangre pueden causar cambios de humor. Cuando algunas personas tienen niveles bajos de azúcar en la sangre, se vuelven alegres y habladores o hipomaníacos y, a veces parecen estar borrachos. La irritabilidad también puede ocurrir. Cuando el nivel de azúcar en la sangre es alto, pueden volverse letárgicos y responder con impaciencia.
Tales reacciones no son inevitables y dependen de la personalidad y de la rapidez con que cambia el azúcar en la sangre.