La diabetes en perros generalmente se diagnostica mediante una combinación de análisis de sangre y síntomas (sed excesiva y orinar).
A veces, el veterinario mantendrá al perro en la clínica durante unos días hasta que el perro se estabilice, luego le enseñará cómo administrar la insulina (la mayoría de los perros diabéticos son de tipo 1 o insulinodependientes) y cómo alimentar, hacer ejercicio y supervisa a tu perro
La diabetes es tratable en las mascotas, al igual que con las personas.