¿Vale la pena vivir la vida cuando se vive en un sueño, es mejor que estar vivo en la realidad?

Vivir en sueños siempre es mejor que la vida real. Esto se debe principalmente a que en el mundo de tus sueños puedes hacer que todo sea perfecto e ideal el 100% del tiempo, sin embargo, la vida real apesta un poco y eso es algo con lo que tienes que lidiar. Usted aguanta la mala basura, pero lo que tiene que hacer es enfatizar que lo bueno siempre busca lo positivo. Hay mucho bueno que encontrar si solo lo buscas. Deja de concentrarte en lo negativo.

Recomiendo hablar con otras personas sobre estas cosas para que puedan obtener su punto de vista también. A veces, hablar de los aspectos negativos de la vida parece hacer que no sean tan malos como en realidad son. Es fácil para nosotros enfocarnos en lo negativo y dejarnos llevar un poco.

Para mí, vivir en un sueño sucede siempre que te encuentras en una situación que no te gusta y no hay forma de cambiarla.

Por ejemplo, vives en el campo. Pero en tu corazón, la vida de la ciudad es el camino a seguir. Estás atrapado en el país. Tu familia está allí, la granja, los animales, la gente del país. Muy dentro de ti, prefieres luces, muchas luces, bares, complejos urbanos, centros comerciales, apartamentos de gran altura, por nombrar algunos. Entonces recurres a “soñar despierto”.

La vida todavía vale la pena vivirla. Si se encuentra en una determinada situación o aprieto, la vida le da la oportunidad de hacer algo en su circunstancia. Te hace sentir vivo sabiendo que implementarás movimientos para realizar tu sueño. Es un desafío, también. La vida te da adrenalina para sobrevivir y subir la escalera del éxito. Entonces ya no vivirás en un sueño una vez que tu sueño haya fructificado.

Ve a The Matrix o es una vida maravillosa. Mismo tema, diferentes conclusiones. La verdadera pregunta es ¿para qué crees que es la vida? Me gusta creer que se trata de crear un mundo mejor para los que vienen después. Eso no es muy posible a partir de un sueño. No tienes impacto en el mundo en un sueño, así que no tienes ningún propósito si te quedas allí. Los sueños son geniales para obtener una perspectiva, pero con el propósito de despertar y actuar.