La estimación de la grasa en el ultrasonido no es lo suficientemente precisa como para determinar la idoneidad para la donación.
La prueba de “estándar de oro” es una biopsia de hígado, pero es un procedimiento invasivo y, por lo tanto, está reservado para su uso en situaciones seleccionadas.
El índice de atenuación del bazo hepático (IAF) en una tomografía computarizada simple es una técnica precisa, no invasiva y relativamente económica para estimar el contenido de grasa para la donación de hígado. Un LAI de +5 o más corresponde a un contenido de grasa de <5% y es adecuado para la donación. El contenido de grasa de más del 15-20% no es aceptable para la donación, ya que representa un mayor riesgo tanto para el receptor como para el donante. Sin embargo, se puede reducir con la dieta y el ejercicio, y si dentro de los límites aceptables de la reevaluación se puede considerar la donación.