Trabajar en un hospital de cáncer de primer nivel me ha enseñado muchas lecciones para combatir esta temida enfermedad. Las personas que realmente se curan son aquellas con un poder de voluntad muy fuerte y aquellas cuya enfermedad se detectó temprano. Ambos son auto-atributos, que implican estar más conscientes del propio cuerpo y aprender a ser positivo. Aunque estoy de acuerdo en que es más fácil decirlo que hacerlo, la buena noticia es que es realmente posible.
Hacer frente al cáncer de mama puede ser un desafío, especialmente después de la cirugía de extracción de senos (mastectomía). En los últimos tiempos, los médicos prefieren la tumorectomía (eliminación de solo la masa tumoral presente como un bulto) sobre la mastectomía radical (extirpación de los senos completos) junto con algunos ganglios linfáticos reactivos donde el tumor puede haberse diseminado. Lo importante para recordar es que después de la cirugía difícil, la fase de quimioterapia y radioterapia, puede llevar una vida absolutamente normal. Después de la cirugía, la aceptación del cambio en el cuerpo y la comprensión de que la belleza no tiene nada que ver con los atributos físicos le ayudará mucho a sobrellevar la enfermedad. Y, por supuesto, no hay nada como un cónyuge de apoyo que te llevará a través de esta fase agotadora. Su única preocupación debe ser seguir rigurosamente las revisiones de rutina, para asegurarse de que el cáncer no vuelva a aparecer. Repito, el seguimiento regular es lo único que de vez en cuando se interpondrá entre sus tareas diarias. ¡Pero confía en mí, valdrá la pena!
¡La única persona que te impide sobrellevar el cáncer de mama y vivir una vida normal serás tú! Por favor, asegúrese de no hacerlo! 🙂