No conozco ningún estudio clínico pero, por extraño que parezca, hace dos días hablé con un compañero que tenía un resfriado terrible y no se daba tiempo y descansaba para lidiar con él. Se convirtió en sinusitis severa y dolor de cabeza.
Dijo que hizo un tazón de vapor con orégano seco y se puso una toalla sobre la cabeza, inhalando durante unos 45 minutos. Dos horas más tarde crepitaba como nudillos crepitantes cuando los aprietas y los senos paranasales se aliviaban, con muchas cosas saliendo.
Me hace pensar que debe ser el carvacrol o simplemente toda la bondad del orégano
