Sí.
El efecto placebo funciona para todas las condiciones de salud .
Esto es posible porque las condiciones de salud son interacciones dentro de nuestras propias biologías y, por lo tanto, siempre estamos contribuyendo con componentes de esas interacciones que pueden alterarse en función de los comportamientos físicos y psicológicos. Nuestras contribuciones pueden alterar todo, desde los síntomas hasta los entornos químicos, la expresión génica y la muerte celular.
La diferencia radica en cómo las personas en particular reaccionan a los placebos particulares y en la efectividad con respecto a las condiciones particulares que cada individuo tiene la facultad incorporada o adquirida para influir en base a estímulos de placebo específicos.
El “efecto Placebo” no se trata tanto del placebo como de nuestra reacción a una idea . Nuestro estilo de reacción y lo que concebimos como la idea son factores determinantes mayores que cualquier otra cosa en la materia.
Por lo tanto, el efecto placebo no es una característica uniforme que puede cuantificarse y explorarse como un tratamiento unifactorial y de potencia única. Cuán influyente es en el tratamiento de condiciones o poblaciones particulares se basa en mucho más que una generalización de la “naturaleza humana”.
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