Esta forma de hablar tiene su origen en el fenómeno de que las personas que tienen prosperidad económica a menudo no pueden sentirse motivadas para hacer un trabajo real, porque sus necesidades ya están atendidas.
Este es el azote de los imperios. Las personas que piensan que tienen derecho a todo se negarán a trabajar. Esta es la razón exacta por la que el sistema económico de Estados Unidos está en declive y China nos está superando rápidamente.
Regla de oro: no importa qué tan rico seas, siempre debes querer más y estar dispuesto a trabajar solo para mantener lo que tienes.