Los azules rusos se consideran hipoalergénicos porque tienden a producir bajos niveles de Fel D1; la proteína contenida en la saliva y la orina del gato.
Un gato se lame el saco, la saliva cargada de D1 se seca en el pelaje, se transporta por el aire sobre la caspa y se dirige a los senos paranasales y otras áreas sensibles a los alérgenos.
También se adhiere a su ropa, paredes, ventanas, ropa de cama y muebles.
La cantidad de Fel D1 puede variar entre gatos individuales dentro de la misma raza e incluso la misma camada. No hay garantía de que un gato descrito como hipoalergénico no cause una reacción alérgica.
