Cuando viajaba siempre odié la idea de perder un vuelo en alguna parte. Estaba paranoico acerca de llegar al aeropuerto muy temprano para no perder el vuelo. No puedo decirte cuántas horas he pasado leyendo novelas en salas de espera porque estaba en el aeropuerto horas antes de lo necesario.
Así que imagina lo molesto que estaba cuando me dirigí a un aeropuerto en Vietnam y descubrí que no llegaba cinco horas antes para mi vuelo, en realidad tenía 19 horas de retraso. De alguna manera, habíamos tenido el día equivocado y habíamos perdido nuestro vuelo por completo. No puedo decirte lo molesto que estaba.
