¿Por qué sería malo si las bacterias terrestres fueran transportadas a Marte y sobrevivieran?

Como otros han notado, la contaminación de Marte con bacterias terrestres confundiría profundamente nuestros intentos de descubrir la vida allí.

Sin embargo, hay otras consideraciones. El Tratado de la ONU sobre el espacio ultraterrestre de 1967 (así como el sentido común) prohíbe la “contaminación nociva” de otros planetas. Es difícil saber si llevar las bacterias de la Tierra a Marte sería dañino. Ni siquiera está claro cómo podríamos definir “perjudicial”, ¿perjudicial para quién? Pero dado el historial de nuestra especie en la introducción de nuevas especies a nuevos hábitats, la probabilidad de daño es muy alta.

Y luego está esto: Carl Sagan y otros han defendido que Marte debería dejarse en manos de los marcianos (si hay alguno). Incluso si esos marcianos son bacterias, el planeta es suyo y tienen derecho a ello.

Tiendo a estar de acuerdo con Sagan, no tanto por motivos morales sino prácticos: la posibilidad de que al introducir bacterias de la Tierra arruinemos las cosas para siempre es bastante cercana al 100%. Marte no irá a ningún lado. Tomemos algunas décadas, o incluso algunos siglos, antes de hacer lo que no se puede deshacer.

Si no hemos destruido nuestro propio planeta mientras tanto, eso es.
Mensaje de Carl Sagan a los exploradores de Marte, con una suave advertencia

¡Muy mal!

Imagínense que los científicos anuncian el descubrimiento de la vida en Marte y, después de algunas investigaciones, resultan ser bacterias terrestres que vienen con nuestras sondas.

Si encontramos vida en Marte, será más importante saber que se desarrolló allí de forma independiente. Esto confirmaría no solo que Marte probablemente era más parecida a la Tierra en el pasado distante, sino que hará que sea mucho más probable que la vida se desarrolle en otros cuerpos en nuestro universo.
Comenzar o reiniciar la evolución en Marte llevaría millones a miles de millones de años si fuera posible y esa evolución no sería necesariamente beneficiosa.

Porque seríamos responsables de la dirección de cualquier ecosistema que exista en Marte. Los microbios de la Tierra competirían por los recursos con los microbios de Marte. Y entonces la respuesta que estamos buscando no responderá debido a nuestra propia contaminación. Es un gran riesgo que la NASA tome en serio.