Sufría de dolores de cabeza diarios después de un año. Tomé yoga, lo que ayudó a mi rigidez general en la espalda y el cuello. No ayudó a los dolores de cabeza.
Dejé de tomar cafeína. Ayuda de alguna manera; en general, estaba menos cansado y los dolores de cabeza por falta de caffiene en los días en que no podía tomar un café se fueron. Aunque no ayudó a mis dolores de cabeza nocturnos.
Luego me revisaron la vista. Resulta que necesitaba anteojos, pero una prescripción tan suave que no podía notar la diferencia, aparte de la fatiga visual, cada vez que hacía un trabajo de cerca. Durante un día laboral de uso y marcado de la pantalla, necesitaba una hora en una habitación oscura. Las gafas lo curaron.
No asuma que los dolores de cabeza regulares son normales. Ellos no son. Y no asumas que tienes que sufrir con ellos. Consulte a un médico y vea a un oculista.