En realidad, no hay mejor momento para dormir y despertar para un estudiante universitario, ya que depende del horario de trabajo diario del alumno.
Lo principal es ver cuánto necesita nuestro cuerpo para descansar, lo que debe realizarse a través del sueño, el yoga y la meditación.
Como hay tantas actividades para que los jóvenes desarrollen su carrera, deben dormir un mínimo de 6 horas al día, especialmente de noche.