¡Sí!
Estados Unidos es en gran medida una tierra de inmigrantes, por lo que muchas de esas tradiciones han sobrevivido y se han transmitido a las siguientes generaciones. Por supuesto, estas tradiciones variarán de una parte del país a otra.
Personalmente tengo dos grandes influencias culturales que afectaron mi amor por los hígados de pollo; mi abuela sureña (de la región montañosa de Kentucky) y mi abuela de herencia alemana. De mi abuela sureña me encantan los hígados de pollo frito, muy parecido al descrito por el usuario de Quora. De mi abuela alemana me encantan los hígados de pollo y las cebollas.
Estados Unidos es visto por muchos como la tierra de los Arcos Dorados, donde las personas comen principalmente de las latas o de las comidas rápidas, pero a muchos de nosotros nos gustan las cosas viejas y nuevas. Así que traednos vuestros hígados de pollo, ¡traed vuestras lenguas de ternera y colas de cocodrilo! ¡Entonces disfrutemos de una comida al aire libre!