De hecho, muchas, si no la mayoría, las personas con narcolepsia tienen al menos un insomnio leve. En la narcolepsia, la disminución de las monaminas que generalmente acompaña al sueño se atenúa. Esto lleva a que las personas no duerman tan bien, ya que no almacenan monaminas estimulantes en las neuronas para la estimulación y la vigilia al día siguiente. Además, las células que inician el sueño REM son suprimidas por el aumento de los niveles de monamina por la noche y puede haber un sueño REM inadecuado, lo que conduce a una mayor presión para caer directamente en el sueño REM durante el día o incluso la cataplejía, donde la parálisis asociada con el sueño REM causa pérdida de tono muscular durante el día. Esencialmente, una forma de entender la narcolepsia es que el nivel de sueño no es lo suficientemente profundo, lo que conduce a una vigilia parcial al día siguiente y que la barrera entre el sueño y la vigilia es incompleta, lo que lleva a los terrores nocturnos también puede ser parte de la narcolepsia.
De manera similar, el tratamiento de la narcolepsia puede implicar una mayor vigilia, a través de medicamentos como Provigil y Nuvigil, o aumentar el sueño REM, mediante el uso de Oxybate sódico, que aumenta marcadamente el sueño REM y mejora la vigilia al día siguiente.
