Olvídese de “lo que debería” y concentrémonos en “lo que sucede”. Algunos días es 80% de duda y 20% de confianza, mientras que algunos días es 80% de confianza y 20% de duda. La probabilidad de lo que pueda suceder dependerá de con qué tipo de personas te hayas rodeado. Mentores, empleados, socios, amigos, familia …
Sin embargo, con la experiencia (de pasar por esto durante años) las reacciones se vuelven más consistentes. Empiezas a creer en tus habilidades y no dejas que la duda afecte tu confianza por un amplio margen … o decides que el estrés es demasiado y te dejas caer.
El aprendizaje clave para mí: no permita que su autoestima varíe según factores y situaciones externas. No permita que la gente lo avergüence por cosas que no conoce y no se califique a sí mismo como un fracaso solo porque no puede obtener los resultados que desea.