Tal vez la fruta es tu respuesta. Mantenga algo de fruta siempre a mano. Lo ideal sería algo agradable como cerezas, uvas o bayas, pero si son demasiado caros o perecederos, tal vez tenga a mano manzanas, naranjas y plátanos.
Estos le darán una sensación completa el tiempo suficiente para irse a dormir.
Si se encuentra en la situación de comer demasiado, no coma el desayuno al día siguiente. Y espere hasta sentirse panza gruñendo con hambre antes de almorzar.